Domar la creatividad
La definición de creatividad del diccionario es muy escueta, sólo dos acepciones. La primera: facultad de crear; la segunda: capacidad de creación. Aunque no sea mucho, hay dos palabritas claves para entenderla: que es una facultad (aptitud, potencia de hacer algo) y que es una capacidad (oportunidad que habilita cierta acción). Yo (y la neurociencia, sobre todas las cosas, que es bastante más docta en el tema) creo firmemente en que la creatividad es algo con lo que todas, todos, todes contamos. Sin excepción. No existe tal ser como alguien no creativo. Puede, quizá, ser poco creativo. Como también se puede ser poco atlético si no se entrena la capacidad de ejercitarse o practicar algún deporte que nos provea de cierta destreza y estado físico que pueda calificarse como tal.